Desde hace algunos años, la disciplina del posicionamiento en buscadores se complejiza: cada vez son más los factores que determinan el lugar de un sitio web en los rankings de resultados de búsqueda. La cantidad de enlaces entrantes sigue siendo importante, pero también hay que pensar en la calidad, la legitimidad y la autoría del contenido. Y a esta lista se suma otro criterio, no siempre tenido en cuenta: la velocidad de carga del sitio web.

En general, cuando un sitio web tarda mucho en cargar, los usuarios lo abandonan a los pocos segundos. Pensando en brindarles una mejor experiencia de navegación, desde el año 2010 Google incluye la velocidad de carga entre sus factores de posicionamiento.

Google determina el rendimiento de un sitio web de diversas maneras:

• Analizando la manera en que las páginas responden a Googlebot, el software que utiliza el buscador para crear el índice de sitios web sobre el que se realizan las búsquedas.
• A través de los mecanismos de medición de Google Toolbar o Google Chrome, en el caso de que el usuario tenga instalada alguna de estas aplicaciones.
• A partir de otras fuentes, no reveladas.

Para mejorar la velocidad de carga de nuestro sitio web, Google nos ofrece la herramienta PageSpeed. En cuestión de segundos podemos obtener un diagnóstico sobre su rendimiento, tanto en dispositivos móviles como de escritorio, y una serie de consejos para mejorarlo.

De todos los factores que inciden en el posicionamiento, la velocidad de carga está entre los de menor prioridad. Sólo es una variable de peso cuando la lentitud es tan importante que dificulta a Google la recolección de datos sobre cada página. Si bien es muy bajo el porcentaje de sitios que ven afectada su relevancia en buscadores por este factor, mejorar la velocidad de nuestro sitio web siempre es de utilidad: mejora la experiencia de usuario, aumenta las conversiones y reduce los costos de hardware.

Comentarios

Sin comentarios todavia!.

Disculpe, los comentarios están cerrados en este momento.